Siempre has sido fecunda, Mariem Hassam, también en el exilio. Tu voz descansa eterna en la arena del Sáhara. No hay otra luz porque los ojos del sol brillan por tí. Tu muerte es agua de rosa, argam del desierto, canto y piel de arena, un té de media luna bajo las jaimas de Tinduf. La esperanza, la dignidad y la gloria de todo tu pueblo libre te cantan, mujer hermosa. Sáhara Vencerá. Salam Aleicum.
"Todos tenemos un deber de amor que cumplir, una historia que hacer, una meta que alcanzar". Gionconda Belli.
"El mundo está lleno de libros preciosos, que nadie lee". Umberto Eco.